CONFUSIONES CAP.2

HOLA CHIQUILLOS Y CHIQUILLAS QUE TENGAN UN EXELENTE DIA, Y EH AQUI EL SEGUNDO CAPITULO DE MI QUERIDO CUENTO, LE NOMBRE CONFUSIONES, YA QUE EN ESTE MOMENTO ESTOY UN POCO CONFUNDIDA CON EL NOMBRE JEJEJE, PERO ESPERO QUE LES GUSTE....CHAITO, NOS VEMOS DESPUES

CONFUSIONES 2A PARTE

Miro a mi alrededor tratando de encontrar algún rostro familiar pero no lo encuentro. En mi habitación solo puedo ver a aquel hombre alto y muy bien parecido, vestía una bata blanca, revisaba mis signos vitales…..

-Fue una suerte que te salvaras…..-dijo mientras me observaba
-de no ser por que en ese momento me encontraba ahí quizás ya no estarías con nosotros.

-Usted fue la persona que me ayudo?- le pregunte.

-Se podría decir que si, pero dime como pudiste ser tan imprudente y pasarte así nada mas?

-honestamente, no se que decirle, tenia la cabeza en otro lado.- pude ver en su rostro una sonrisa, quizás un poco burlona y me quede callada.

-Bueno señorita déjeme decirle que no a dejado de recibir visitas desde ayer, afuera esta un chico muy insistente dice que es su novio, cree que este en condiciones de recibirlo?

-su nombre,-dije sin tomar importancia a lo que el doctor me decía- ¿Cuál es su nombre?

-Mi nombre? O el del chico?-respondió algo confundido

-¿Cuál es tu nombre?- repetí

-Me llamo Fabian.

-Mucho gusto yo soy…..

-Amanda…..-me interrumpió, con esa voz gruesa y varonil, pero lo que me sorprendió más fue que sabía mi nombre..
- Tuve que buscar una identificación entre tus cosas, espero no te moleste, fue solo para avisarle a tus familiares...- en ese momento interrumpió una enfermera.

-Doctor, le están esperando en la sala de urgencias.

-Voy en un momento- dirigió su mirada hacia mi y con un tono serio me dijo- espero que te mejores, nos vemos después.

-Demasiado lindo para ser verdad- me dije a mi misma- pero dicen que soñar no cuesta nada.
De nuevo estaba sola y un profundo silencio se apodero de aquella habitación, un silencio que solo rompió aquel sonido incomodo de alguien que llamaba a la puerta.

-¿Puedo pasar?- una voz familiar se asomo por aquel silencio incomodo que albergaba no solo en aquella habitación, si no también en mi alma.
-Pasa- y sin poder reaccionar ya me encontraba entre sus brazos, era mi chico aquel al que un día antes había decidido dejar pero que con el accidente, ya no pudo ser.

Continuara……